Este es el segundo remake estadounidense del gran monstruo japonés ficticio que apareció por primera vez en la pantalla grande en 1954. Descrito como un enorme dinosaurio mutante de 200 metros de altura, Godzilla tiene poderes atómicos, pulsos magnéticos y regeneración instantánea, entre otras características. Su origen es asociado a pruebas nucleares del pacífico y de alguna forma como respuesta al ataque nuclear recibido por Japón en la Segunda Guerra Mundial.
Esta cinta del director Gareth Edwards intenta dar al relato un tono más familiar y épico que la primera versión norteamericana de 1998 del director Roland Emmerich. Si bien logra capturar la atención al comienzo de la historia, el guión decae progresivamente a manos de espectaculares efectos especiales, luchas despiadadas y una destrucción y desolación impresionante. Ahondar en la trama es contar la película, pues es especialmente sencilla, por lo que es mejor dejar abierta la interrogante o bien, si tenemos mucha curiosidad, ver el trailer que adelanta mucho más de lo recomendable, a mi modo de ver.
Los puntos bajos tienen que ver básicamente con la historia que va de más a menos. Personajes que prometen y se quedan en meros dibujos y un ritmo decreciente que, a pesar de guardar la aparición de Godzilla hasta bien avanzado el metraje, no logran mantener la tensión necesaria y esperada. La cinta se desinfla y va cayendo en su dinámica en la medida que los malignos monstruos se toman la pantalla y la intervención de Godzilla se hace indispensable para mantener el equilibrio y por cierto, el interés. Tanto es así que los actores principales, Ford Brody -Aaron Johnson-, Elle Brody -Elizabeth Olsen- y Joe Brody -Bryan Cranston- se van diluyendo lentamente entregando el protagonismo y dejando todo en manos de las enormes criaturas.
Los puntos altos son sin duda los magníficos efectos visuales, una excelente partitura original de Alexandre Desplat -que destaca desde un comienzo- y entretención garantizada si no se espera nada profundo a cambio. En resumen, 123 minutos que pueden ser eternos o bien 123 minutos que pueden ser un atractivo espectáculo audiovisual. De todas maneras queda particularmente claro para uno u otro caso, que Godzilla está producida con el fin de ser un éxito de taquilla y recaudar mucho más que los 160 millones de dólares invertidos en hacerla realidad. Y hasta el momento, lo está logrando sin mayores problemas, lo que a esta altura de desarrollo de estas mega producciones, no es un tema menor.
Ficha técnica
Titulo Original: Godzilla
Distribuidor: WARNER
Calificación: TE+7
Duración: 123 minutos
Género: Ciencia Ficción, Ficción y Suspenso
Año: 2014
País: Estados Unidos
Elenco: Aaron Taylor-Johnson, Elizabeth Olsen y Bryan Cranston
Director: Gareth Edwards