miércoles, 4 de junio de 2025

Los People in the Dragon

“Faltan comedias en el cine, falta que nos riamos con chilenos, especialmente de nosotros mismos, porque si hay algo que hacemos y somos buenos los chilenos, es reírnos de nosotros mismos, especialmente de nuestras desgracias.”
 Palabras de Pablo Greene sobre la génesis de esta película, en su debut como director luego de ser productor y coguionista de las películas “Mala Junta” y “Mis hermanos sueñan despiertos”, junto a Claudia Huaiquimilla.

“Los People in the Dragon”, nombre desde ya curioso, aborda la historia de una banda musical aclamada como la gran promesa del rock chileno hasta que les sucede una tragedia de proporciones. Faltando pocas horas para debutar en el Festival de Viña del Mar, su voz principal, Álvaro -José Antonio Raffo-, muere repentinamente. Pasan 10 años y su exmánager Maca -Catalina Saavedra-, se propone revivir la banda para hacer un tributo al vocalista e interpretar la última canción que escribió para, así, tratar de lograr una meta ansiada: vivir de la música.

Esta cinta tiene méritos innegables. Primero, la música compuesta especialmente por Abel Zicavo y Camilo Zicavo, los dos hermanos que son el puntal de la banda. Segundo, asume directamente la dificultad económica que significa ganarse la vida desarrollando un proyecto artístico, en este caso musical. Y tercero, a mi gusto el más importante, nos hace dudar de si lo que vemos en pantalla es realidad o fantasía, es decir, si lo que se cuenta respecto a este grupo y su famoso hit, “Queso y Jamonada”, es verdad o mentira.

Jugando, entonces, como falso documental, porque la presencia de Catalina Saavedra como la exmánager de inmediato nos lo deja claro, la composición gráfica de este trabajo también combina otros estilos y modos de filmar. Esa cercanía de algunos planos descuidados junto a otros bien delimitados, aporta frescura al relato. Aunque la naturalidad de los actores no es lo que más destaca, existe la sensación de que hay bastantes momentos de improvisación calculada que no dejan cabos sueltos. Como contrapunto, y en otras secciones, ciertos diálogos o situaciones se sienten forzadas, algo incómodas, como si no hubiesen tenido la suficiente libertad de acción para moverse a sus anchas al interrumpir escenas que podrían haberse resuelto mejor.

Puntos más, puntos menos, esta nueva comedia del cine chileno apunta a sorprender. Lúdica y con gran desparpajo, nos invita a recorrer sus 15 temas que ya están disponibles en Spotify; música que podría tomar vuelo propio, y por qué no, alentar a un grupo verdadero de fans. ¿Y si la historia se trasladara a la vida real? Sería más curioso aún, pero no es descabellado pensar que el trabajo musical desarrollado por los hermanos Zicavo quede solo como la música incidental de una película. Tal vez está destinado a tomar otros rumbos. El tiempo lo dirá.

Ficha técnica

Título original: Los People in the Dragon
Año: 2024
Duración: 95 minutos
País: Chile
Compañías: Lanza Verde
Género: Comedia | Música
Guion: Pablo Greene, Claudia Huaiquimilla
Música: Abel Vivo, Camilo Calvo
Fotografía: Guillermo Ribbeck
Reparto: Catalina Saavedra, José Antonio Raffo, Abel Zicavo, Mario Ocampo, Camilo Zicavo, Ana Reeves, Juan Anania, Jose Nast,, Francisco Pérez-Bannen, Felipe Rojas
Dirección: Pablo Greene 

lunes, 2 de junio de 2025

Corazón Delator

¿Qué harías si te enamoraras de la persona que más sufrió por quien te salvó la vida? Esta pregunta es central en esta historia que sigue a Juan Manuel -Benjamín Vicuña-, exitoso empresario del rubro inmobiliario que acaba de recibir un trasplante de corazón. ¿El donante? Pedro -Facundo Espinoza-, un humilde y cariñoso padre de familia quien sufre un accidente de tránsito que lo deja con muerte cerebral.

Ambos hombres llevan vidas muy distintas; en las antípodas, se podría decir. Por una parte, Juan Manuel, rodeado de lujos, con una vida cómoda, sin sobresaltos ni grandes cuestionamientos. Entre la espaciosa casa donde reside en solitario y su oficina en un alto edificio de Buenos Aires, su principal actividad recreativa es el tenis mientras mantiene una superficial relación con su novia. Pedro, por su lado, forma parte del grupo de vecinos de una villa a quienes se les ha comunicado que deben desalojarla porque una empresa construirá un gran complejo en la zona. Dos mundos totalmente opuestos, unidos solo por una fugaz coincidencia y un destino inesperado.

Esta película, escrita y dirigida por Marcos Carnevale, resulta tan evidente como ingenua. Innegable es su cinematografía, pero no es suficiente para ocultar algunos baches narrativos que hacen que la historia pierda naturalidad. Etiquetada como drama, el humor no deja de estar presente, ya sea a cargo de un carismático personaje del barrio, o por parte del mejor amigo de Juan Manuel, -Peto Menahem-, su asistente personal y su brazo derecho empresarial. Pero tampoco eso termina por convencer, porque, en esencia, no es una comedia, sino un drama

La trama principal se refiere a la historia de amor que surge cuando Juan Manuel conoce a Valeria -Julieta Díaz-, la viuda de Pedro, mientras busca saber quién ha salvado su vida. Y eso no es todo, porque el guion pone varios de sus puntos en una problemática social, en el conflicto antagónico entre los poderosos y los sacrificados residentes de un barrio que parece destinado a desaparecer en nombre del progreso. Al momento de producirse los cruces, es decir, cuando Juan se ve impulsado a hacer algo por los vecinos, las diferencias sociales se acrecientan. Una serie de cuadros representan fielmente aquello, como eso de ir en un Audi a la villa o viajar en el transporte público, algo que para el protagonista es absolutamente desconocido.

Punto a destacar en este metraje es el proceso de transformación que sufre Juan Manuel. Aunque absolutamente predecible, Benjamín Vicuña encuentra el tono para mostrar la sensibilidad que emerge al despertar a una nueva vida. Ese golpe de realidad no pasa inadvertido, exige un cambio notable, y atribuible, o no, al nuevo corazón, es un cambio radical al fin y al cabo. Es sabido que luego de eventos trascendentes los seres humanos cambiamos, y este es el pilar fundamental de un relato que, desde ese punto de vista, se blinda con coraje y realidad.

La premisa de “Corazón Delator” la hemos visto varias veces antes pero no deja de llamar la atención, básicamente porque nos preguntamos si habrá alguna sorpresa o cambiará la forma de resolver los diferentes nudos de un tema que puede tener más o menos desarrollo. En este caso, la falta de conflictos explícitos y la previsibilidad general hacen que la historia pierda fuerza ya que todos los hechos siguen un curso obvio y sabemos perfectamente qué va a suceder en cada momento. Ante este escenario, cabe preguntarse: ¿qué diferencia a esta producción de otras? ¿Dónde se encuentra el valor agregado, o la razón de presentar una nueva historia de trasplante de corazón y transformación?

Pero no todo es menor en esta nueva apuesta de Netflix. Benjamín Vicuña aporta oficio, Julieta Díaz naturalidad, y el elenco de secundarios ofrece esa frescura y carisma argentino que hace que los 89 minutos de duración casi no se sientan, y dejen, al final, una sensación bastante agradable.

Ficha técnica


Título original: Corazón delator
Año: 2025
Duración: 89 minutos
País: Argentina
Compañías: Sony Pictures, Leyenda Films, Kuarzo Entertainment Argentina. Distribuidora: Netflix
Género: Drama
Guion: Marcos Carnevale
Música: Gerardo Gardelín
Fotografía: Horacio Maira
Reparto: Benjamín Vicuña, Julieta Díaz, Peto Menahem, Gloria Carrá, Julia Calvo, Yayo Guridi, Bicho Gómez
Dirección: Marcos Carnevale