sábado, 12 de julio de 2025

Jurassic World: Renace

Un detalle puede cambiar el giro de los acontecimientos. Y eso es justamente lo que sucedió hace 17 años en un laboratorio ultrasecreto ubicado en una remota isla, un centro de investigación de Parque Jurásico encargado de hacer estudios de ADN y mutaciones de diferentes especies de dinosaurios. Nos dicen que los dinosaurios han vuelto a vivir entre nosotros hace 32 años, en un entorno que no ha sido el más tranquilo ni el más feliz, por lo que en el presente se encuentran mayoritariamente radicados en aislados ambientes de las regiones ecuatoriales, donde el clima recuerda al que conocieron en su época.

En esta oportunidad, la clave para arriesgar una visita a una zona declarada como prohibida, dados los riesgos y peligros que encierra, es un descubrimiento médico importante. Tres de las criaturas más grandes que habitan esa biosfera tropical poseen en su ADN una sustancia vital para fabricar un medicamento que aportará grandes beneficios para el tratamiento de las cardiopatías. Obviamente, los grandes laboratorios están tras el proyecto y es fundamental adelantarse y conseguir las muestras cuanto antes.

La expedición, con un costo millonario y tecnología de última generación, es liderada por Zora Bennett -Scarlett Johansson-, experta en operaciones de este tipo, quien debe guiar al equipo de especialistas reclutados para la misión. Sin embargo, lo que no está en los planes de Zora, y de ninguno de sus compañeros, es la necesidad de rescatar a una familia cuyo barco vuelca por culpa de dinosaurios acuáticos, provocando que los dos grupos terminen en la isla abandonada y deban luchar por salvar sus vidas.

Gareth Edwards filma un guion clásico escrito por David Koepp. Digo clásico no porque sea un texto antiguo o consolidado. Lo menciono porque no tiene absolutamente ninguna sorpresa y en general resulta ser bastante plano. La pregunta a esta altura, luego de innumerables intentos por recuperar la esencia de la película original de 1993 y con ello honrar al prolífico Michael Crichton, creador de la historia, es si se justifican tantas vueltas de tuerca para volver a mostrar en pantalla a estas extraordinarias criaturas extintas que han vuelto a renacer gracias a la tecnología molecular. Y la respuesta tiene, al menos, dos vertientes. La primera, se justificaría en la medida que nuevos efectos especiales permitan recrear diversas especies, haciéndolas más realistas y mucho más temibles. Sin embargo, la segunda veta podría no justificarlo, porque la temática la hemos visto tantas veces, que cualquier intento de renovación suena repetido y no aporta sustancia a algo que, poco a poco, ha ido perdiendo interés.

Así las cosas, y sin optar por ninguna de las dos tesis, sigo ahora escribiendo como fan de Jurassic Park -la original-, tratando de rescatar las razones por las que no me pierdo ninguno de los intentos por revivir a estos imponentes saurios.

Esta versión tiene varios elementos que nos recuerdan la cinta original y más de una de sus derivadas. Hay dinero, mucho dinero, una negociación, una expedición, una travesía y, por supuesto, un accidente. Siempre es una sorpresa la primera aparición de un dinosaurio, y aquí no es la excepción. Se produce en el agua, justamente para causar el hundimiento del barco de la familia que posteriormente debe ser rescatada por la expedición. Buenos efectos allí, convincentes.

El otro punto por el que esta nueva versión no se puede dejar de ver es la música, encargada al compositor Alexandre Desplat. Como podrán suponer, es un concierto de principio a fin. Desde los sones que acompañan la llegada de un helicóptero a la isla -literal reminiscencia de la cinta original-, hasta la derivación de cada una de sus partes, Desplat compone un verdadero “tema con variaciones” basado en las células, motivos y armonías de la música compuesta por John Williams el año 1993. Es precioso cómo cada secuencia es intervenida por el compositor para no perder su esencia y, a la vez, entregar una partitura nueva, fresca y complementaria con las imágenes que vemos en pantalla.

Otro aspecto a destacar de este trabajo son los parajes idílicos en los que transcurre. Los protagonistas, en especial Scarlett Johansson, Mahershala Ali, Jonathan Bailey y Rupert Friend, se desenvuelven con soltura en esos ambientes hostiles y traspasan su química a la pantalla, logrando credibilidad en sus papeles, dentro de lo que se puede pedir, por supuesto.

Otro guiño a la obra original radica en aspectos referidos a las decisiones, convicciones y prioridades. Por ejemplo, seguir adelante con la misión o acudir al rescate de náufragos indefensos. También, y en un tono más profundo, se encuentra aquello que tiene que ver con las dudas éticas. ¿Es válido el esfuerzo y entregar los resultados de la expedición a laboratorios que van a lucrar millones haciendo una medicina cara e inalcanzable para muchos? O por el contrario, ¿se debe preferir entregar las claves en forma abierta para beneficio de una mayor cantidad de población? El debate es tan interesante y, por cierto, tan actual -en sus diferentes aspectos-, que seguirá abierto muchos años más.

Es destacable que el mismo libreto, a esta altura casi un manual de estilo, nos sorprenda una y otra vez. Y claro, al ver a Steven Spielberg como productor ejecutivo, no podía ser de otra manera. En un poco más de dos horas, “Jurassic World Rebirth” tiene todos los elementos que se necesitan para configurar la historia: recuerdos, nostalgia, cruces, aventuras paralelas, secuencias que asustan (y mucho), como la del río, buenas dosis de lucha, sacrificio, bondad y también castigos.

Tratando de responder, entonces, la tesis planteada aunque no sea un erudito sino solo un fan de “Jurassic Park” y de los dinosaurios recreados, espero que la imaginación de futuros creadores nos entreguen más historias para disfrutar en pantalla grande. Eso sí, solo pido una cosa: ya que los efectos son cada vez mejores, ojalá podamos profundizar en las narrativas y en la forma de componer los relatos. Si eso se logra, larga vida tendrán las próximas secuelas, precuelas y derivadas, para la taquilla en general y para regocijo de nosotros, sus fans, en particular.

Ficha técnica

Título original: Jurassic World Rebirth
Año: 2025
Duración: 134 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Amblin Entertainment, Universal Pictures, The Kennedy/Marshall Company, Latina Pictures. Distribuidora: Universal Pictures
Género: Ciencia ficción. Acción. Fantástico. Aventuras | Secuela. Dinosaurios
Guion: David Koepp
Música: Alexandre Desplat
Fotografía: John Mathieson
Reparto: Scarlett Johansson, Mahershala Ali, Jonathan Bailey, Rupert Friend, Manuel Garcia-Rulfo, Ed Skrein
Dirección: Gareth Edwards 

jueves, 10 de julio de 2025

Superman

Esperada como muchas, convincente como pocas. Así es este nuevo “Superman” escrito y dirigido por James Gunn, co-presidente y co-CEO de “DC Studios”. Como primera película del nuevo Universo DC (DCU), no solo marca un buen comienzo sino que, además, agrega un sello que dará que hablar. Revisemos.

¡Cuántas versiones hemos visto de Superman en pantalla grande en el último tiempo! Muchas. Desde las cuatro primeras, protagonizadas por Christopher Reeve, hasta la saga del universo extendido de DC, ha pasado mucha agua bajo el puente mientras el hombre de acero parecía haber perdido el rumbo. Pero no. Con James Gunn al rescate y las icónicas tres notas musicales que evocan el tema principal, este nuevo renacer del personaje en pantalla grande promete y, sin duda, llega para quedarse.

Vamos un poco a la trama. Clark Kent/Superman -David Corenswet-, trabaja como periodista del Daily Planet, en Metrópolis, y tiene mucho éxito. Su inconfesable amor por su colega Lois Lane -Rachel Brosnahan-, es motivo de discordia, ya que sus exclusivas entrevistas al carismático superhéroe lo han llevado, incluso, a ser portada del periódico. El tema es que Superman pasa por un momento delicado. Por primera vez ha perdido una batalla y sus colegas de la “Banda de la Justicia”, ahora con más argumentos, lo cargan por ser ingenuo.

Por otra parte, LuthorCorp, una enorme empresa de tecnología liderada por Lex Luthor -Nicholas Hoult-, el archienemigo de Superman, participa favoreciendo la intervención militar en un conflicto armado entre dos países. Luthor tiene ambiciones exponenciales: quiere dominarlo todo y su piedra de tope es justamente este “metahumano” que figura como defensor de los más vulnerables.

Así las cosas, no es difícil imaginar el desarrollo de la película, sin embargo, la mirada se aleja un poco de los clásicos conflictos y da paso a otras aristas que, con el correr del metraje, van tomando forma y se desarrollan de forma vertiginosa. No es bueno adelantar más, a mi modo de ver, para que ustedes mismos descubran por qué esta nueva versión puede realmente significar un antes y un después.

En poco más de dos horas, James Gunn se da maña para tirar toda la carne a la parrilla. Acá se trata de recuperar un icono del que conocemos piezas clave de su historia. Por ello, está presente el inmenso cariño de sus padres adoptivos en la Tierra, el recordado video mensaje entrecortado de sus progenitores kriptonianos, su gran amor por Lois, la lealtad con sus amigos y los deseos infinitos de hacer el bien e impartir justicia. Por supuesto, las cosas se tuercen en el camino, pero la columna vertebral se sostiene gracias a vigorosos enfrentamientos y nuevos personajes -como un can que seguramente será furor-, que mantienen la historia siempre a buen recaudo.

Excelentes efectos especiales y una partitura de remembranza contribuyen a dar forma a una película que se siente como un nuevo punto de partida. Las actuaciones de David Corenswet, Rachel Brosnahan y Nicholas Hoult son muy sólidas. La elección de Corenswet para el papel principal, sorpresiva en su momento, no deja lugar a dudas que es acertadísima. No solo consigue una química natural con Rachel Brosnahan, sino que, también, funciona perfecto al confrontar a su antagonista, un inspirado Nicholas Hoult, quien aporta todo lo necesario para transformarse en un personaje odiososamente malo. El resto del coro complementa bien, con detalles que seguramente darán material para secuelas o posibles “spin offs”, algo que ya se vislumbra en el horizonte cercano.

“Superman” y sus 129 minutos es disfrutable de comienzo a fin. Vibrante, emotiva y entretenida, recupera un nicho por años olvidado. Ahora es un Superman con tecnología, muy acorde a los tiempos, con villanos de carne y hueso y también con máquinas robóticas, combinando mundos como para volver a tener fe en el emblemático personaje.

Es tiempo de ir al cine, a la pantalla más grande posible y a la sala más cómoda, para reencontrarse con una magia que ofrece experiencias, no solo películas. Conviene aclararlo. Esto es cine de entretención y no cine arte. Tampoco podemos esperar profundidad narrativa ni nuevos desarrollos formales. No. Estamos en presencia de una película que tiene muy claras sus intenciones: ser un éxito de taquilla y ganar dinero. Pero ojo. El mérito es que no se queda solo en eso, porque también recalca algo que en estos tiempos también se encuentra extraviado. Me refiero al valor de la bondad y lo que significan las decisiones que tomamos respecto a nuestros propios actos. Eso sí tiene valor universal y debemos ser capaces de recuperarlo cuanto antes.

Ficha técnica


Título original: Superman
Año: 2025
Duración: 129 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: DC Comics, DC Entertainment, Warner Bros., DC Studios, The Safran Company, Troll Court Entertainment. Distribuidora: Warner Bros.
Género: Ciencia ficción. Acción | Superhéroes. Cómic. DC Comics
Guion: James Gunn. Personajes: DC Comics. Personaje: Joe Shuster, Jerry Siegel
Música: John Murphy, Dave Fleming
Fotografía: Henry Braham
Reparto: David Corenswet, Rachel Brosnahan, Nicholas Hoult, Edi Gathegi, Anthony Carrigan, Nathan Fillion, Isabela Merced
Dirección: James Gunn

martes, 8 de julio de 2025

La Vieja Guardia 2

Disponible en Netflix.

Se veía venir, ¡cómo no! Luego del éxito del 2020, la historia quedó abierta y una probable continuación era un hecho cierto. Pues bien, acá está la segunda parte de “La Vieja Guardia”, ahora con un nuevo desafío, un tanto más complejo que el anterior.

Seis meses después de los eventos de la primera película, Quỳnh -Veronica Ngô-, antigua compañera del equipo, es rescatada de su prisión acorazada en el fondo del mar, por la primera de las inmortales, una mujer llamada Discord -Uma Thurman-. Sus intenciones son claras desde un comienzo: aprovechar el resentimiento acumulado por Quỳnh para llevar a cabo un plan destinado a recuperar el poder perdido.

Los personajes son los mismos de la anterior entrega. Andy -Charlize Theron-, Joe -Marwan Kenzari-, Nicky -Luca Marinelli-, Nile -KiKi Layne-, Copley -Chiwetel Ejiofor-, y Booker -Matthias Schoenaerts-, a los que se suma Henry Golding para dar vida a Tuah, un sabio-inmortal residente en Seúl. Este grupo ampliado deberá recorrer varias ciudades hasta llegar a Indonesia con el fin de desactivar una amenaza inminente: la toma de una central nuclear.

La verdad es que la historia no es lo más importante en esta cinta. Claro, conecta con la parte uno, pero no es necesario conocer mayores detalles para entenderla, porque esta vez se trata de quienes obtienen el poder de la inmortalidad y quienes lo han perdido.

El elenco se ve afiatado y ofrece buena química entre sus integrantes. Como en muchas de estas producciones, los mejores momentos de la cinta son los de acción. Sin embargo, lamentablemente se ven interrumpidos por secciones bastante lentas, algunas carentes de ritmo e incluso de sentido, cuyo objetivo es entregarnos pistas de la trama y también enlazar más en profundidad a los personajes. Y acá una observación, porque si bien las secuencias de persecuciones y peleas destacan, lo hacen dentro de un global que queda bastante, bastante al debe.

El cambio en la dirección resiente el resultado final. Esta vez, los efectos especiales se notan más y las coreografías resultan un poco forzadas. ¿Será que estamos mal acostumbrados o nos hemos puesto más exigentes? No lo sé, pero en películas de este tipo ya tenemos un mínimo y debemos esperar que se construya desde allí.

Bien Charlize Theron con la evolución de su personaje, nada que decir, y también con el acompañamiento de un elenco sólido y con buenos nombres. Uma Thurman brilla de villana pero aparece muy poco, tal vez guardándose para una indispensable tercera parte que esperamos sea la final, salvo que la premisa y los buenos elementos se logren consolidar, superando ripios que, a esta altura, no debemos dejar pasar.

Pero no todo es negativo en las casi dos horas que dura “The Old Guard 2”. Al elegirla, sabemos a lo que vamos y eso se agradece. ¿Tiene acción? Bastante. ¿Buenos actores? Por supuesto. ¿Secuencias trepidantes? Unas cuantas. ¿Giros y sorpresas? Algo de eso hay. Y lo más importante, ¿entretiene? Sí, aunque nos deje de nuevo un final abierto, sin resolver.

Ficha técnica

Título original: The Old Guard 2
Año: 2025
Duración: 105 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Denver and Delilah Productions, Image Comics, Marc Evans Productions, Skydance Productions, Panorama Films, Pinella Productions S.r.l. Distribuidora: Netflix
Género: Fantástico. Acción. Aventuras | Secuela. Cómic
Guion: Greg Rucka, Sarah Walker. Novela gráfica: Greg Rucka, Leandro Fernandez. Cómic: Top Cow Productions
Música: Ruth Barrett, Steffen Thum
Fotografía: Barry Ackroyd
Reparto: Charlize Theron, KiKi Layne, Matthias Schoenaerts, Marwan Kenzari, Luca Marinelli, Veronica Ngô, Henry Golding, Uma Thurman, Chiwetel Ejiofor
Dirección: Victoria Mahoney 

viernes, 4 de julio de 2025

El Tema del Verano

No soy muy fan de las películas de zombis, por lo que reconozco, tuve que mentalizarme para darle una oportunidad a este nuevo filme del director uruguayo Pablo Stoll.

“El tema del verano” comienza de forma concreta, en una playa, donde de improviso emergen zombis de la arena y hacen que el grito de una mujer congele todo. A partir de ese hecho, viajamos tres meses atrás para conocer la historia.

Ana, Malú y Martina recorren la costa perpetrando certeros golpes. Como chicas atractivas, hábiles e implacables, poco les cuesta seducir a sus víctimas, para luego drogarlos y robarles todo. Estamos en un contexto pospandemia, por lo que llama la atención el cuidado por los controles y las mascarillas, sin embargo, las tres protagonistas se los saltan olímpicamente, mostrando que nada puede impedir sus oscuras intenciones.

Al preparar el asalto mayor, aquel que afectará al excéntrico millonario Ramiro Tübingen, quien además es un generoso mecenas de artistas, el derrotero las conduce a una impresionante mansión costera, lejos de la civilización, ubicada en un lugar idílico. Allí se encuentran con tres residentes muy diferentes pero fácilmente conquistables. El plan sigue su curso, urdido bastante bien, pero sucede algo que cambia por completo el escenario: por error, matan a sus víctimas, pero estas no mueren y reviven para hacerles “la vida” imposible.

Interesante es el escenario que plantea Stoll. Una casa lujosa, amplia, llena de comodidades, pero con la sensación de que algo no cuadra, que algo se ha torcido en el camino. Esta residencia es un paraíso de lugar, pero el anfitrión no está. Las chicas no son muy bien recibidas por una mujer que se muestra altanera y distante, aunque sí lo son por otros dos varones; uno de ellos, curiosamente, resulta ser chileno.

A muy poco andar, el metraje deriva en escenas sin sentido, débiles y sin forma. La tensión está en las relaciones entre los protagonistas, una tensión ambiental que no logra adquirir profundidad ni desarrollar otras aristas que pudieran despertar más interés.

Los secretos que oculta la casa parecen muchos, pero son las invitadas las que toman el control hasta que descubren lo que allí se lleva a cabo. ¿Giro? Tampoco. No alcanza. “El tema del verano” es una canción que se está creando por encargo, pero también pasa lo mismo. Es solo una anécdota que pasa sin pena ni gloria.

La idea que presenta el guion de Pablo Stoll y Adrián Biniez es interesante, pero no se condice con su posterior ejecución. Lo fílmico también destaca, pero no resulta suficiente. Lo que sí funciona es la música incidental y la banda sonora, recursos muy bien conseguidos que se posicionan en el lugar más alto de la producción.

“El tema del verano” es una seudocomedia, una seudopelícula de zombis y un seudodrama, una extraña mezcla que, no estoy seguro, logre entusiasmar o realmente funcione. La trama avanza poco, un mes, dos meses, y transcurren frente a nosotros gran parte de los minutos del rodaje sin que suceda nada muy sustancial.

Bien las temáticas: la pandemia, el capitalismo y su fin, el ideal del hombre nuevo y todas las referencias humanas y políticas, un paralelo con la realidad actual, más una discusión sobre las vacunas como mecanismo de control. Acá está de manifiesto la supervivencia, el igualitarismo, los instintos y las distintas representaciones de los ideales sociales y políticos.

Aunque sin profundizar, lo que podría quedarnos es el desarrollo de una nueva sociedad, una de zombis, marcada por la ley de la selva y algo, tal vez, no muy apartado de lo que vivimos actualmente. ¿Es eso lo que el director nos quiere transmitir como un mensaje premonitorio?

Nuestro trabajo será descubrirlo e interpretarlo.

Ficha técnica

Título original: El tema del verano
Año: 2024
Duración: 91 minutos
País: Uruguay
Compañías: Coproducción Uruguay-Argentina-Chile; Temperamento Films, La Unión de los Ríos, Nadador Cine
Género: Thriller. Comedia. Terror | Zombis. Pandemias. Robos & Atracos. Comedia de terror
Guion: Pablo Stoll, Adrián Biniez
Fotografía: Manuel Rebella
Reparto: Débora Nishimoto, Azul Fernándes, Daniel Hendler, Malena Vila, Agustín Silva, Sebastián Irrutia
Dirección: Pablo Stoll 

miércoles, 2 de julio de 2025

Harta

Disponible en Netflix.

No sabemos qué es peor, si el calor o el molesto ruido, pero para Janiyah y su hija Aria, vivir allí es un suplicio. Las dificultades son evidentes. Condiciones precarias, una orden de desalojo en curso, el aseo deficiente y un ambiente externo hostil, no hacen más que agravar la crisis. Aun así, Janiyah se impulsa, se levanta, baña a su hija y ambas salen rumbo al colegio. Es día de pago, por lo tanto podrá abonar el arriendo del lugar y entregar 40 dólares para que su pequeña asegure el almuerzo en su escuela.

Sin embargo, las cosas solo empeoran para la protagonista. En el trabajo, el ambiente es aún peor. Su jefe la maltrata verbalmente y los clientes abusan de ella, incluso poniendo en peligro su integridad. Una llamada del colegio la pone en alerta. Debe ir de inmediato porque existe un problema grave con su hija. Ausentarse de sus labores no está permitido, menos ese día que está repleto de gente. Sin embargo, obtiene 30 minutos de margen. El día oscuro sigue su curso, porque un incidente camino a la escuela la cruza con un hombre enfurecido que resulta ser un policía fuera de servicio que llega, incluso, a amenazarla de muerte. Sin sus papeles al día, le cursan una infracción y le requisan su auto. Aún hay más, pero no se los voy a adelantar, porque lo que viene a continuación va de mal en peor.

Tyler Perry escribe y dirige este drama de proporciones con oficio y seguridad. La connotación social impacta de entrada. Sabemos lo cruda que puede llegar a ser la pobreza, pero un retrato vívido como el que expone esta película nos lo deja aún más claro. Al comienzo, una secuencia de más de 20 minutos muestra una literal caída al vacío.

Objetivamente no hay salida posible. La suma de hechos es angustiante y no podemos despegarnos de la pantalla ni un segundo. La empatía con la protagonista es instantánea, por su condición, por su hija, por sus dificultades como madre, como trabajadora, y además por la discriminación que sufre por el color de su piel. Quisiéramos ayudarla, pero no podemos. Solo observamos la dirección que toman los hechos y, violentamente, nos sorprendemos.

Después de ese inicio cuasi transgresor, la película ingresa a un valle del que le cuesta escapar. Es en el sector medio, de casi una hora, donde el metraje se divide en dos: lo que pasa dentro del banco y lo que sucede afuera, con la policía y el FBI sin saber bien qué hacer. En ese momento emerge la figura de la detective Kay Raymond -Teyana Taylor-, quien comienza a tomar las riendas de un evento que aventura un desenlace inesperado.

Los últimos minutos, algo así como el cuarto final de la cinta, es agudo gracias a un giro que no vemos venir. Como construcción, llega algo tarde, tal vez sin el apropiado contrapeso previo, pero funciona para crear una historia que penetra más por la complejidad de su fondo social que por la elaboración fílmica de la que da cuenta.

“Straw”, en sus casi dos horas, nos mantiene atentos y pone en relieve que los seres humanos respondemos de acuerdo a las circunstancias. Un mal día lo tiene cualquiera, pero una vida en condiciones infrahumanas es otra cosa. El mérito innegable de esta producción es el tratamiento de temas que a veces se relegan y se esconden debajo de la alfombra. La maternidad bajo presión, la enfermedad, la falta de oportunidades, la falta de dinero, la ausencia de redes de protección, la soledad, la marginación y la humillación, se levantan como banderas de lucha que se movilizan y presionan para conseguir un futuro mejor. Tal vez para Janiyah pudo haber sido tarde, pero su ejemplo podría servir a otras personas que están en condiciones similares y aún pueden salir del pozo.

Tyler Perry deja tarea para la casa.

Ficha técnica

Título original: Straw
Año: 2025
Duración: 105 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Netflix, The Tyler Perry Company. Distribuidora: Netflix
Género: Drama | Maternidad
Guion: Tyler Perry
Música: Dara Taylor
Fotografía: Justyn Moro
Reparto: Taraji P. Henson, Sherri Shepherd, Teyana Taylor
Simbad, Rockmond Dunbar, Ashley Versher, Mike Merrill, Glynn Turman
Dirección: Tyler Perry 

lunes, 30 de junio de 2025

Echo Valley

Disponible en Apple TV+.

Esta es una de esas películas que necesitan tiempo y, tal vez, una oportunidad. La demora en plantear el verdadero nudo de conflicto toma nada menos que 40 minutos, es decir, un tercio del metraje. Antes, y también algo después, es lenta, confusa, e incluso un poco exagerada, para exprimir una problemática íntima sobre la difícil relación de una hija con su madre recientemente viuda, quien apenas puede sobrellevar la pérdida y se enfrenta a una soledad que la carcome por dentro y por fuera.

Kate -Julianne Moore-, tiene problemas en casi todos sus flancos. Acaba de perder a su esposa Patty, la granja que administra tiene serias dificultades financieras y su hija Claire-Sydney Sweeney-, no logra superar una situación inestable producida por el consumo de drogas y la relación tóxica con un novio involucrado en el comercio de estupefacientes.

Una madre está dispuesta a todo por sus hijos y esta no es la excepción. Kate no duda un instante en prestar ayuda a su hija a pesar del sinnúmero de actitudes equívocas y la imposibilidad de hacerse cargo de su propia vida.

Cuando hay dinero de por medio, es decir, cuantiosas deudas relacionadas con drogas, la situación se hace prácticamente inmanejable. Sin embargo, ahí está Kate, al pie del cañón, siempre dispuesta, pero con la conciencia de que en algún momento eso debe parar.

El tema explota una noche en que la joven vuelve a la granja con su camisa ensangrentada. No es de ella. Ha tenido una discusión con su novio con consecuencias fatales. Este, sin duda, es un problema mayor. ¿Qué puede hacer, sino recurrir a su madre? Ese es el meollo: la manipulación constante por parte de Claire, quien sabe que su madre no le negará nada y que estará dispuesta a cruzar cualquier límite por salvarla.

Dirigida por Michael Pearce y con buenas actuaciones de Julianne Moore y Sydney Sweeney, esta película parece no despegar nunca. Es posible que el exceso de tiempo empleado en los dos tercios iniciales le juegue un poco en contra. Hay mucho contexto, muchos paisajes -bellos, por cierto-, descripciones introspectivas del duelo de la protagonista con largos planos en silencio, algunas discusiones acaloradas y poco, muy poco más. A esa altura, es difícil aventurar qué rumbo tomará la historia y cuáles de las aristas de la trama serán finalmente abordadas.

Y sucede lo impensado. Un giro radical se toma el relato. Aunque perfectamente coincidente con lo anterior, desde ese momento comienza otra película, el verdadero thriller que afortunadamente recordaremos, ya que logra tensión creciente y, gracias a ello, los puntos más altos.

“Echo Valley” no destaca ni brilla, pero al menos presenta un trabajo que va de menos a más, con una partida floja y un desenlace bastante más que aceptable. Guardemos las proporciones, eso sí. Se trata de una película menor, como muchas de las posibilidades que entrega el streaming actual. Sin embargo, el atractivo de sus protagonistas y un buen nivel de producción, son ganchos suficientemente potentes para darle una oportunidad. Con paciencia y sin expectativas, es una buena opción para una tranquila tarde de domingo.

Ficha técnica


Título original: Echo Valley
Año: 2025
Duración: 83 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Apple Original Films, Scott Free Productions, The Walsh Company, Apple Studios, Black Bicycle Entertainment. Distribuidora: Apple TV+
Género: Thriller. Drama | Maternidad
Guion: Brad Ingelsby, Michael A. Pruss
Música: Jed Kurzel
Fotografía: Benjamin Kracun
Reparto: Julianne Moore, Sydney Sweeney, Domhnall Gleeson, Kyle MacLachlan, Fiona Shaw
Dirección: Michael Pearce 

jueves, 26 de junio de 2025

F1

Con la velocidad de un rayo llega “F1“, y es la película que tenemos que ver. Veamos por qué.

La premisa es sencilla y nos presenta a Sonny Hayes -Brad Pitt-, un expiloto de F1 que es contactado por su antiguo compañero de equipo, Rubén Cervantes -Javier Bardem-. Ambos corrieron juntos en los años 90 y ahora sus vidas han tomado rumbos muy distintos. Sonny es un piloto busca vidas, a contrata, que va de competencia en competencia sin tener un norte claro. Rubén, en cambio, es el dueño de un equipo de Fórmula Uno pero no ha tenido el éxito esperado. Sin resultados y tremendamente endeudado, si no consigue dar un golpe de timón para modificar su suerte, se verá obligado a vender la escudería a pesar de contar en sus filas con la gran estrella del momento, el novato Joshua Pearce -Damson Idris-. Sonny es la última carta de Rubén, un movimiento arriesgado y al borde del descalabro. ¿Funcionará su estrategia o está todo sentenciado?

Si bien hay varios personajes, Brad Pitt carga con el peso del relato, muy bien secundado por Idris, Condon y Bardem. La historia construida por el mismo director, Joseph Kosinski, con guion de Ehren Kruger, es fácil de seguir, e incluso hasta un poco previsible, pero eso no importa, porque funciona y bastante bien. Los diálogos son directos, tal vez sin demasiada elaboración, pero con lo justo para aportar los antecedentes necesarios que permitan ir descubriendo a cada uno de los protagonistas. Las químicas en pantalla también entregan valor, porque al imán de Brad Pitt se le suma la genuina amistad que representa Bardem, la antipatía visceral encarnada por Idris y el interés amoroso en la presencia de Kate McKenna -Kerry Condon-, directora técnica del equipo APXGP.

“F1”, desde el punto de vista de la producción, es sensacional.

Primero, recrear las carreras y todo el entorno del llamado “circo de la Fórmula 1” es un desafío monumental, y esta cinta lo supera con creces. No en vano, filmaron dentro de las carreras reales de las temporadas 2023 y 2024, crearon paddocks especiales y recibieron todo el apoyo del Formula One Group, responsable de la promoción de la categoría de elite de la FIA.

Segundo, adaptar los autos para hacerlos competir con los verdaderos bólidos de Red Bull, McLaren y Ferrari, entre otros, y hacer esto creíble, es otra hazaña técnica, en la que el apoyo del siete veces campeón del mundo, Lewis Hamilton, quien también es productor del filme, sin duda se nota, a la par del gran trabajo de Mercedes F1, responsable del diseño de los coches de APXGP.

Tercero, filmar dentro de la pista y desde el interior de los autos, requiere medidas especiales. Si bien aquello se ve en las actuales carreras del campeonato, la imagen no tiene una definición adecuada para el cine, por lo que Apple -distribuidora de la película-, modificó módulos específicos de los autos para incrustar, con las mismas dimensiones y pesos, cámaras adaptadas de iPhone controladas a distancia por iPads, constituyendo una proeza técnica. Todo esto, además, a más de 200 km por hora.

Otro tópico que se agrega a la excelencia de esta realización es la precisa fotografía de Claudio Miranda, la que entrega tomas originales captando escenas desde ángulos que pocas veces hemos observado en otras películas de este género.

¡Y qué decir de la banda sonora! Hans Zimmer, responsable de la música incidental, suma emoción y épica a la historia, mientras la música recorre famosas canciones junto a otras especialmente compuestas para esta ocasión.

Los decorados, los ambientes, la trastienda y todo el glamour de la Fórmula Uno se ve realzado con un trabajo al detalle para cada uno de los elementos. Por eso, ver esta película es sumergirse realmente en ese mundo, una experiencia diferente y muy gratificante. Además, es casi mágico ver en pantalla una extraña combinación ficción-realidad, porque junto a los actores también vemos a los pilotos actuales -Verstappen, Leclerc, Alonso, Sainz, Russell y Hamilton, entre otros-, y directores de equipo, como Zak Brown, CEO de McLaren Racing, Christian Horner, director y CEO de Red Bull Racing, Frédéric Vasseur, director de Scuderia Ferrari, y algunas sorpresas más.

“F1: The Movie” es vibrante y sus dos horas y media pasan en un suspiro. A pesar de ser un producto comercial destinado a recaudar una abultada taquilla -como se les llama a los denominados “blockbuster”-, se las ingenia para contener de todo un poco. Por ejemplo, desde la acción y el romance, pasa a los valores, como el trabajo en equipo en la alta competencia, la resiliencia para sobreponerse a situaciones adversas y el espíritu de superación que debe estar siempre presente para liderar cualquier disciplina deportiva. Los antivalores también están en el juego, bien representados por los antagonistas de la historia que, además, varían durante el metraje.

En definitiva, vértigo, emoción y entretención garantizada. No deje de verla. ¡Es de las imperdibles del año!

Ficha técnica

Título original: F1: The Movie
Año: 2025
Duración: 155 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Apple Original Films, Monolith Pictures, Jerry Bruckheimer Films, Plan B Entertainment, Dawn apollo.
Productor: Brad Pitt, Lewis Hamilton. Distribuidora: Warner Bros., Apple TV+
Género: Acción. Drama | Coches/Automovilismo. F1
Guion: Ehren Kruger. Historia: Joseph Kosinski
Música: Hans Zimmer
Fotografía: Claudio Miranda
Reparto: Brad Pitt, Damson Idris, Kerry Condon, Tobias Menzies, Javier Bardem
Dirección: Joseph Kosinski 

lunes, 23 de junio de 2025

Elio

¿Y si no estamos solos en el universo?

Esta es la premisa desde la que se construye esta nueva entrega de Pixar.

Elio es un niño de 11 años, solitario y muy tímido. Ha quedado huérfano y está al cuidado de su tía Olga, quien trabaja en una base militar, dedicada a la observación del espacio exterior. Obsesionado con el mundo extraterrestre, lo único que desea Elio es ser abducido. Es su sueño, su motivación y dedica todos sus esfuerzos para conseguirlo. El tema es que cuando se llega a producir el fenómeno, los líderes del Comuniverso lo reciben como un candidato a embajador del planeta Tierra y le piden encabezar una particular negociación con un personaje llamado Grigon, un postulante que amenaza la vida de los extraterrestres. ¿Podrá Elio sacar adelante su misión?

Pixar Animation Studios nos tiene acostumbrados a admirar poderosas historias representadas con deslumbrantes efectos de animación. “Elio” no es la excepción, pues el despliegue en pantalla es hermoso, con bellas imágenes y una composición estética que destaca tramas y colores que resultan vibrantes.

Desde el punto de vista de la historia, se aprecia una contradicción vital. Por una parte, Elio es un niño que no encuentra su lugar, no se siente querido, no encaja con nada y lo único que desea es establecer contacto con otros mundos. En pocas palabras, alguien que tiene su autoestima muy frágil, busca desesperadamente encontrar su propio espacio dentro de la inmensidad del universo.

Elio está convencido de que hay otros seres más allá de nuestro planeta. Inspirado en la sonda Voyager, su incansable búsqueda tiene que dar frutos, tarde o temprano. Establecer ese contacto es fundamental y, aunque está dispuesto a esperar su oportunidad, nunca deja de hacer todo aquello que esté en sus manos.

Por otra parte, los vínculos familiares de Elio son débiles. La ausencia de sus padres se siente, y su tía, por muy bien intencionada que ella sea, no puede suplir una creciente necesidad de afecto y de cariño. Para agravar más la situación, Elio tampoco cuaja con los niños de su edad, ya sea por su interés desmedido en el universo o simplemente por ser alguien que se aísla ante cualquier situación complicada.

Cuando sucede la anhelada abducción y comienza la aventura galáctica, la película da un salto cuántico. Por un lado, el escenario creado para representar ese “mundo de mundos” es tremendamente colorido, nutrido con personajes extraños que combinan lo bello y lo espeluznante, en otra dicotomía difícil de conceptualizar y, aún más, de representar visualmente. Junto a lo anterior, el diseño de elementos resulta genial, como por ejemplo ese súper ordenador líquido que cambia constantemente de forma o aquel manual del universo, una especie de GPT a nivel galáctico.

Otros temas entran en juego en la medida que el metraje avanza hacia su médula más interna. Por ejemplo, el tema de la clonación, las vidas paralelas y la necesaria negociación para solucionar conflictos. Asimismo, cuando Elio encuentra un par, es decir, alguien más que se siente inadaptado y tiene temores igual que él, surge espontáneamente la amistad como un canal unificador, una fuerza que comienza a entregarles seguridad en la medida que aumenta aquel sentimiento genuino.

“Elio” constituye otra preciosa reflexión de Pixar sobre el crecimiento y la maduración, esta vez con elementos del espacio, con un precioso escenario moderno e innovador. Además, está presente la búsqueda de identidad, el valor de ser uno mismo, donde cada persona es única y valiosa por su propia individualidad, sin necesidad de nada más.

Conocer para entender, sentir para comprender, ejes fundamentales en todo proceso de crecimiento cobran relevancia, pues antes de cada logro ha sido necesario optar y decidir.

Los más pequeños admirarán los juegos; los preadolescentes verán nuevos mundos y tal vez se sentirán identificados por el protagonista; los ya adolescentes disfrutarán de las coloridas aventuras; y los más grandes gozaremos cada detalle de una película que llega para quedarse.

¿Cuánto de Elio hay en cada uno de nosotros? Encontrémonos, entonces, en nuestro propio comuniverso.

Ficha técnica

Título original: Elio
Año: 2025
Duración: 90 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Pixar Animation Studios. Distribuidora: Walt Disney Pictures
Género: Animación. Ciencia ficción. Comedia. Aventuras | Infancia. Extraterrestres. Aventura espacial. Pixar
Guion: Julia Cho, Mark Hammer, Mike Jones
Música: Rob Simonsen
Fotografía: Animación, Derek Williams, Jordan Rempel
Dirección: Madeline Sharafian, Domee Shi, Adrián Molina

miércoles, 18 de junio de 2025

Cómo Entrenar a tu Dragón

DreamWorks se suma a la tendencia de hacer remakes de exitosas películas animadas en el estilo live action. ¿Después del encanto de las películas originales, esta, una reanimación -literal- es necesaria? Veamos.

La historia es básicamente la misma, no tiene grandes variantes. En una isla vikinga llamada Beck, sus habitantes luchan encarnizadamente contra dragones que vienen a robar comida y ganado, y atacan todo a su paso. Así, el peligro es enorme, porque estos dragones se transforman en peligrosas máquinas de lanzar fuego.

Estoico, el jefe de la aldea, lo tiene claro. Si no descubren pronto el nido de los dragones, nunca dejarán de estar expuestos a su amenaza. Hipo, su hijo de 16 años, ve las cosas de otra manera. Su sueño es matar un dragón para ser considerado un guerrero, por lo que su plan es bastante más simple: derribar y cazar alguno, si es que llega a tener una pizca de suerte.

En una de esas refriegas de grandes proporciones, Hipo se alista para poner en práctica su plan. Apunta al cielo con una maquinaria rudimentaria construida con su gran imaginación y sucede lo impensado. Logra impactar a un dragón negro que parece ser una leyenda. Se trata de Furia Nocturna, un alado prácticamente invisible porque, a pesar de ser ampliamente conocido, nunca nadie lo ha visto.

El tema es que cuando Hipo lo encuentra perdido en el bosque, el pequeño dragoncito aún está vivo, aunque amarrado y vulnerable. Al estar imposibilitado de desprenderse de sus cuerdas, se encuentra a merced de los deseos de su perseguidor. Hipo quiere matarlo pero no puede. Es incapaz de hacerlo. Su bondad es mayor. Es más, lo desenreda y lo deja libre. Los roles se invierten y el dragón puede ahora tomar fácilmente la vida de Hipo. ¡Vaya paradoja! Sin embargo, la gratitud en la vida se devuelve, y, desde ese momento, “Chimuelo” y el joven soñador se vuelven inseparables.

La historia es tierna y encantadora. Basada en los libros de Cressida Cowell, esta película comienza con un tema aspiracional, con la necesidad de Hipo de encajar dentro de un pueblo guerrero que vive entre enfrentamientos permanentes, batallando y sin rendirse, en una guerra que es, por donde se la mire, desigual. Hipo desea ser el mejor y no la tiene fácil. Es el hijo del jefe, y ese es un handicap importante, ya que es mirado con recelo por sus pares. Es por eso que le cuesta mucho más posicionarse, debe trabajar el doble o el triple, y su mayor recompensa sería demostrar su valía matando a un dragón.

Pero el encuentro con “Chimuelo” lo cambia todo. Primero en secreto, el desarrollo de esa amistad le permite adquirir herramientas para participar en un entrenamiento en el que comienza a percibir que los dragones no son malos por naturaleza. Hay algo más de fondo allí. Mientras las caricaturas abundan entre los jóvenes aprendices, no todo es sencillo para nuestro protagonista. Además, cuesta tiempo que Hipo y “Chimuelo” vayan congeniando. Desde la desconfianza inicial, son los juegos entre ambos los que producen un acercamiento que lleva poco a poco al conocimiento. Existe un tránsito allí, un progreso que va creciendo paso a paso.

Dirigida por Dean DeBlois, “Cómo entrenar a tu dragón” luce fresca y renovada en esta recreación de acción real. Además, la combinación de actores de carne y hueso con los efectos especiales funciona muy bien. El metraje exuda simpatía y las aventuras resultan vibrantes, con cámaras vertiginosas que destacan especialmente las bellezas del paisaje de Irlanda del Norte, lugar donde fueron filmados los exteriores.

Tal como en la original, los valores que encierra esta fábula son muy variados. Hablamos, entre otros, de amistad, de confianza y del surgimiento de vínculos y afectos entre dos partes aparentemente irreconciliables. Esta enseñanza, tan simple y profunda a la vez, viene muy bien en los tiempos actuales de polarización y crispación. Debemos ser capaces de descubrir nuevas soluciones y no hacer siempre lo mismo. Variar para cambiar, aplicar un necesario giro en la lógica desde la cual enfrentamos los problemas.

Respondiendo la pregunta inicial, este live action sí vale la pena. Y, parafraseando otras tantas moralejas de películas de este tipo, es verdad que otro mundo es posible. ¿Qué tal si hacemos un esfuerzo y entre todos lo intentamos siguiendo el ejemplo de Hipo y Chimuelo?

Ficha técnica

Título original: How to Train Your Dragon
Año: 2025
Duración: 125 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Universal Pictures, DreamWorks SKG, Marc Platt Productions. Distribuidora: Universal Pictures
Género: Fantástico. Aventuras. Acción | Dragones. Vikingos. Amistad. Remake
Grupos: Cómo entrenar a tu dragón
Guion: Dean DeBlois. Libros: Cressida Cowell
Música: John Powell
Fotografía: Bill Pope
Reparto: Mason Thames: Nico Parker, Gabriel Howell, Julian Dennison, Bronwyn James, Harry Trevaldwyn, Peter Serafinowicz, Ruth Codd, Naomi Wirthner, Nick Frost, Gerard Butler
Dirección: Dean DeBlois 

lunes, 16 de junio de 2025

Cuidadoras

La cámara se sumerge al interior de un hogar de ancianos. Las imágenes se quedan con los cuidados recibidas por los residentes. Mediante diálogos suaves y conversaciones cotidianas nos enteramos de las diversas personalidades de quienes habitan el lugar. También conocemos brevemente a Luciana, Maia y Yenifer, tres de sus cuidadoras que recién pasan los treinta, mujeres trans que acceden a su primer trabajo formal después de pasar años en la calle ejerciendo el comercio sexual.

Gestos tan sencillos como alimentar, peinar, o pintar las uñas, se transforman en conversaciones, consejos y directrices que los mayores entregan a las jóvenes encargadas. De a poco, se van conociendo, se cuentan sus historias y se generan vínculos. Emerge pronto la confianza, una cercanía que se transforma en empatía, afecto y cariño.

Las directoras Martina Matzkin y Gabriela Uassouf describen, sin temor, la soledad y abandono de quienes viven en el lugar. Se perciben los lazos perdidos, la nostalgia y la debilidad, aspectos que ciertamente afectan su salud física y mental. Asimismo, vemos necesidad de entretención. Coincidentemente, el hogar celebra su aniversario, ya son 80 años, por lo que se efectúan números artísticos, proyecciones de películas y otras actividades físicas y de esparcimiento.

“Cuidadoras” permite dar visibilidad a diversas situaciones cotidianas junto con acercar dos mundos muy diferentes que, de otra forma, podrían no haberse vinculado nunca: por una parte, los ancianos; por otra, estas mujeres que buscan un espacio en la vida y exploran una labor que podría ofrecerles una oportunidad a futuro.

En algunos momentos, la cinta adquiere un tono cercano al reportaje, con imágenes fragmentadas y cierta falta de cohesión narrativa, pero aún así se logra percibir un hilo conductor en el transcurso del metraje. Mientras los residentes viven su propio atardecer, las cuidadoras observan cuidadosamente el porvenir. ¿Cómo se ven más adelante? Escudriñan, analizan el pasado. ¿Están, ahora, a medio camino? ¿Es esta una prueba? ¿Un intento? ¿Será este un paso definitivo, o bien es solo algo transitorio?

Se suman preguntas y más dudas, porque esta proyección bien podría ser un paréntesis, ya que la expectativa de vida de las personas trans en Argentina es de apenas 40 años.

Para reflexionar.

Ficha técnica

Título: Cuidadoras
Género: Documental
Duración: 80 minutos
Reparto: Maia Antesana, Yenifer Franco Pereira, Luciana Méndez
Directoras: Martina Matzkin, Gabriela Uassouf 

viernes, 13 de junio de 2025

Amor en la Gran Ciudad

Toda una sorpresa. Sin conocer mayores detalles, me esperaba una de esas típicas películas románticas “chica conoce chico”, y vaya que errado estaba. “Amor en la Gran Ciudad” es bastante distinta, veamos por qué.

Esta cinta, basada en el primer relato de la novela homónima escrita por Park Sang-young, gira en torno a dos jóvenes, Jae-hee -Kim Go-eun-, y Heung-soo -Noh Sang-hyun-, dos seres tan distintos como el agua y el aceite. Remarcando sus personalidades opuestas, Jae-hee es libre y espontánea, no teme ser como es y le da lo mismo lo que el resto piense de ella. Transita con total desparpajo y eso es lo que cuenta: vivir la vida a concho. Heung-soo, por su parte, es todo lo contrario. Tremendamente reservado, al borde de una timidez paralizante, oculta su homosexualidad como el tesoro más cuidado. Ni siquiera sus más cercanos lo saben, incluyendo a su madre, a quien profesa un temor inconfesable.

Así las cosas, ¿qué es lo que lleva a estos jóvenes a trabar amistad y convertirse en mejores amigos, inseparables compañeros de rumbo? La imagen inicial de la película puede confundirnos un poco: ella vestida de novia, fumando en una terraza y él acercándose lentamente. Es cierto, partimos por el final, sin embargo el recorrido es largo para poder comprender el verdadero significado de esa apertura.

Sorpresa, mencioné al inicio de estas líneas. Claro. Y no es que carezca de romance, pero uno distinto al que habríamos esperado de entrada. ¿Drama? Por supuesto, a raudales, y en temáticas de complejo tratamiento, sobre todo al interior de una cultura diferente en la que algunas situaciones de Occidente no se encuentran normalizadas. ¿Comedia? También, con buenas dosis de humor que alivianan de forma natural algunas secuencias con alta carga emocional.

La pareja protagónica posee una química muy agradable. Muy bien llevados por la directora Lee Eon-hee, ambos actores son capaces de entregar a sus personajes rasgos distintivos con mínimas gestualidades. Se complementan tan bien que por momentos parecen hermanos, por el grado de cariño y acogida que logran transmitirse mutuamente.

Uno tras otro, los temas atraviesan cada minuto del metraje. La diversidad de estudiantes, la rebeldía, el atrevimiento, la censura, el conservadurismo, la protección de las tradiciones, el machismo imperante, la descalificación a priori y la búsqueda de la propia identidad, van cruzando cada situación cotidiana, algunas llenas de conflicto y otras más livianas, con la frescura y naturalidad de una juventud que quiere abrirse paso y romper con ciertos moldes preestablecidos.

“Love in the Big City” adopta un enfoque distinto para narrar un tema ya explorado en otras películas. De hecho, la explícita mención al filme “Llámame por tu nombre”, de Luca Guadagnino, no es antojadiza. Aunque añadida a la película -no está en el texto original de la novela-, intenta hacer una conexión respecto a la dificultad que vive el protagonista para hacer pública su condición. Ese nudo de conflicto, permanente y transversal, es tal vez el foco central de un relato que nos lleva de la mano a través de los edificios y calles de una ciudad de Seúl cada vez más diversa y cosmopolita.

Ficha técnica

Título original: Love in the Big City
Año: 2024
Duración: 118 minutos
País: Corea del Sur
Compañías: Megabox Plus M
Género: Drama. Romance
Reparto: Kim Go-eun, Noh Sang-hyun
Dirección: Lee Eon-hee 

miércoles, 11 de junio de 2025

Horizonte

Descrita como una “odisea fantasmal” por su guionista y director, César Augusto Acevedo, esta cinta colombiana apoyada por fondos de ayuda de Ibermedia y presentada en la sección Discovery del Festival Internacional de Cine de Toronto, sigue la historia de Inés -Paulina García-, y Basilio -Claudio Cataño-, madre e hijo, en busca del padre desaparecido a través de un recorrido por lugares devastados por la guerra: pueblos destruidos, campos abandonados, ríos convertidos en cementerios e innumerables historias de desolación y muerte.

La película expresa el tránsito entre la culpa y el perdón, un camino difícil de describir y que implica deshacer y rehacer el sendero. El hijo y su madre se acompañan; avanzan juntos, pero al mismo tiempo separados. Un delgado hilo, el arrepentimiento, los mantiene unidos, sin embargo, es tan frágil que en cualquier momento puede llegar a cortarse.

Revisitar el pasado es doloroso y observar sus consecuencias puede resultar una carga insoportable. Eso hace Inés y Basilio, sin apuro. Caminan lento, a veces sin rumbo, perdidos como dos fantasmas o almas en pena, buscando respuestas a las preguntas que la vida les ha dejado sembradas.

La fotografía de Mateo Guzmán deslumbra con paisajes amplios de montañas y valles, una sierra tan vasta que ofrece un contrapunto a la historia escondida en sus entrañas. Porque ahí están los deudos, como un imperecedero recuerdo de la acción criminal de un hombre inconsciente y transformado.

En un poco más de dos horas, Paulina García y Claudio Cataño nos conducen a la exploración de su propia intimidad. En parte lo consiguen y en parte no, porque el formato, aunque amplio en escenarios naturales, remite mucho más a lo interno, como en el teatro, que a una composición cinematográfica. Vemos personajes solitarios aunque estén juntos y tengan un objetivo común. Es su propia vida la que prima: la del hijo buscando consuelo y la de la madre que cuestiona pero acoge sin condiciones.

Difusa, imaginaria y etérea, “Horizonte” se perfila, gracias a sus composiciones y metáforas, como una obra difícilmente abarcable, inasible pero a la vez concreta, donde la búsqueda de redención se expresa a través de protagonistas que anhelan las raíces de su tierra.

Ficha técnica

Título original: Horizonte
Año: 2024
Duración: 125 minutos
País: Colombia
Compañías: Coproducción Colombia-Chile-Francia-Alemania-Luxemburgo; Ciné-Sud Promotion, Inercia Películas, Don Quijote Films, Tarantula, unafilm
Género: Drama | Familia
Guion: César Augusto Acevedo
Música: Harry Allouche
Fotografía: Mateo Guzmán
Reparto: Paulina García, Claudio Cataño, María Victoria Hernández, Ángela Patricia Cano, Edgar Durán Galindo, Michael Steven Henao, Juan Sebastián Angarita, Tifany Rodríguez FandiñoPaulina Garcia, Claudio Cataño
Dirección: César Augusto Acevedo